Nueva etapa en Falso Nueve

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Alves crece por dentro

Análisis táctico de una nueva tendencia en el FC Barcelona con Daniel Alves como protagonista.

Anticiparse al recurso del rival

Análisis táctico del partido Valencia CF-Real Madrid CF disputado en la 13ª jornada.

27 abr 2011

Sin el elemento diferencial

Durante el día de ayer, mientras casi todos los medios estaban pendientes del cambio de tono de Pep Guardiola en la curiosa rueda de prensa que ofreció el técnico, se dio a conocer una de las noticias que puede marcar una transcendencia vital para los intereses del equipo blaugrana. La baja de Andrés Iniesta. Presumiblemente el elemento diferencial del FC Barcelona sobre el Real Madrid, y que ya lo era estando Khedira, cuando en la segunda parte de la final de copa fue el que activó al equipo para alcanzar un fútbol de mayor calidad, dando fluidez a la pelota, batiendo líneas en conducción y dando profundidad. Los matices que debía trabajar el equipo sobre el rival sobre todas las cosas. Y es que Andrés, sólo hay uno.

Ante la que se consideraba la hipotética alineación antes de conocerse el pronóstico del jugador en el día de ayer, quizás Mourinho tenía algo preparado viendo el último precedente. Quizás Pepe encimándole o Lass en marca individual. El caso es que, tuviera lo que tuviera preparado, a día de hoy no es viable dado que el de Fuentealbilla no estará sobre el campo salvo sorpresa. En este caso, Pep Guardiola dispondría de cuatro opciones, todas diferentes y que como la decisión de cómo conformar la defensa, adquiere un volumen global.

La primera pasa por no cambiar. Dar entrada a un jugador de perfil similar al de Andrés Iniesta como lo es Thiago. El canterano está para jugar, ya se confió en él ante el Villareal en el Madrigal cumpliendo con nota. Siempre que ha tenido minutos, ha demostrado que sirve para estar ahí, que es candidato absoluto a superar el corte y que debe contar con más minutos. Quizás este no fuera el escenario perfecto, ya que es un ambiente brutal. Semifinales de Champions ante el máximo rival en su campo con toda la presión que esto conlleva. Pero el hijo de Mazinho, a pesar de ser bastante joven, ya tiene pintas de jugador veterano y esto suma a su favor. Como opción aportaría ese plus de magia que aporta Andrés, ese “hacer lo que menos se espera” porque tiene calidad e inteligencia para ello. Calidad en la salida del balón, algo importantísimo en el día de hoy, ya que una mala elección de pase puede desencadenar un contraataque del rival, y en esa faceta el conjunto blanco, es el mejor del mundo. Y quizás, ahí también residiría el mayor peligro de su alineación. Por otra parte, es un jugador que en el contexto del partido de hoy podría ser el mayor beneficiado en lo que a espacios se refiere. Con una fase defensiva centrada en Messi, Xavi y en los costados, aparecerá el espacio de recepción para Thiago. Sería una apuesta valiente, una apuesta por el fútbol y algo que seguramente Mourinho no tendrá tan bien estudiado como a las demás opciones.

Otra de las alternativas pasa por la alineación de Keita. Que si ya existía la posibilidad de alinearlo por las bajas en defensa, sin Iniesta, tiene mayor porcentaje de participación. El malí como ya hemos comentado en las previas anteriores jugando en el interior aporta ese juego físico para hacer frente al que presumiblemente sea el fortísimo mediocampo del conjunto de José Mourinho, Xabi Alonso, Lass y Pepe. Como analizamos en el partido contra el Shakhtar, una de las nuevas variantes tenía a Keita por protagonista y en el escenario de hoy podría ser una opción. Empujar al rival contra su propia portería, presión, fuerza, juego aéreo para una variante en la salida del balón, jugador apto para fase defensiva, con recorrido y ocupación de las líneas de pase y una opción más en las importantísimas jugadas a balón parado. Pasa por ser la opción por la que se decanta la prensa, haría falta ver lo que piensa Guardiola.

La tercera en discordia como solución individual es la alineación de Ibrahim Afellay. El holandés cada partido se siente más cómodo, desentona menos y desplega su fútbol con menos timidez y menos miedo al fallo. A pesar de ser un jugador de perfil ofensivo, ya actuó en Eindhoven como mediocentro o interior, pero allí se jugaba para él. Es un jugador físico, con fuerza y que en momentos determinados puede llegar a abarcar mucho terreno y ejercer una presión exquisita. Su manejo de las dos piernas le permiten jugar por cualquiera de los dos perfiles y la idea inicial sería emparejarlo con Lass Diarrá para poder explotar sus virtudes. El francés del Real Madrid tiende a hacer kilómetros innecesarios y aunque luego los recupera por físico, se pueden aprovechar bastante bien los espacios que conceda. Sobre todo siendo un jugador que tiene capacidad para batir líneas en conducción.

La cuarta solución y última, también comentada por Pep Guardiola en rueda de prensa es la de un cambio de sistema. Aquí nos caen diferentes ideas. ¿Tres atrás? ¿1-4-4-2? ¿1-4-2-3-1? Son varios los registros que puede poner en liza el técnico. Y que también concedemos la duda al planteamiento de José Mourinho, conociendo la noticia de ayer. Podría volver al sistema habitual con Pepe en el centro de la defensa y el doble pivote Lass-Xabi Alonso. Algo que posiblemente tengan en cuenta en el cuerpo técnico blaugrana.

Como siempre, que gane el que mejor fútbol haga.

25 abr 2011

La duda de Guardiola

Entrando en materia Champions después de los dos primeros enfrentamientos entre ambos equipos, el FC Barcelona tiene que volver al Santiago Bernabeu. Ésta vez para la mayor competición futbolística a nivel de clubes. Lo hará con su técnico inmerso en las dudas de cómo superar a un rival que se ha mostrado bastante sólido en los anteriores enfrentamientos con las bajas importantes que posee en la zona defensiva. A pesar de que a principios de temporada el equipo contaba con tres potenciales laterales izquierdos, por unas razones u otras, tanto Abidal como Adriano y Maxwell no estarán disponibles para la cita. A esto podríamos sumarle la posible ausencia de Gabriel Milito y la duda del capitán Carles Puyol. El dilema para conformar una defensa en condiciones para afrontar con garantías el encuentro se antoja con trajes de puzzle de diez mil piezas. Ya que tendría que tirar de jugadores que aunque ocasionalmente han llegado a formar parte de la línea defensiva, no es su naturaleza posicionarse ahí, por lo que la decisión adquiere un contexto mucho más global para el equipo.

A pesar de que Maxwell pudiera llegar al partido, Guardiola no las tendría todas consigo para alinear al brasileño, y la piedra angular para armar el equipo es si se dispone o no de Puyol. A partir de ahí el equipo podría adquirir una forma u otra. La idea principal, y la que cuenta con más papeletas si se cuenta con el capitán es la de desplazar a Javier Mascherano al lateral, formando el “5” junto a Piqué en el centro de la zaga y Busquets como mediocentro. De esta manera y empezando desde atrás, se daría más libertad a la incorporación de Daniel Alves por carril derecho, que en los últimos partidos no había sido algo tan frecuente como lo es en el discurso habitual. Y quizás, este también sea el punto más diferencial a la hora de decidirse. Alves es más que un lateral y si logra imponer su fútbol, como ya comentamos, el Barça tendrá muchas más facilidades para dar fluidez y profundidad al equipo gracias a la amplitud que aporta dicho elemento. Con esto, el Barça quedaría cerrando con tres jugadores en fase ofensiva y liberando en cierto modo a Busquets para hacer superioridad al centrocampismo del FC Barcelona. Ya no es lo mismo cerrar con Piqué, Busquets y Adriano, que hacerlo con Piqué, Puyol y Mascherano, las cosas cambian.

El argentino nunca ha jugado en dicha posición. No lo hizo en River, tampoco en Inglaterra, ni en su paso por Corinthians. Tampoco en la albiceleste. Pero dada su capacidad de lectura del partido y técnica defensiva lo hacen un jugador viable para la posición. Tampoco había jugado de central y hemos descubierto a un jugador reconvertido en dicha posición que ofrece un rendimiento excelente. Además, cuenta con un plus. Sea cual fuere su marca en dicha parcela, Mascherano sobre el papel podría oponer resistencia por cualidades. Con Cristiano Ronaldo en derecha, el argentino da el perfil necesario para aguantar al portugués. Por potencia, por fuerza, por coraje. Igualmente que si fuera Özil, donde el alemán podría convertirse en el objeto más querido por Mascherano, dado su fútbol. El chico para todo cada vez comprende mucho más la filosofía blaugrana.

Aunque aún estando Puyol disponible, podría dar lugar a otra variante. Mantener a Mascherano en el centro de la defensa, como lo viene haciendo en los últimos partidos y dar al capitán el lateral izquierdo, no siendo la primera vez que se desempeñara en dicha posición. Esto daría pie a un contexto muy parecido al comentado anteriormente en fase ofensiva, pero se desnaturalizarían dos posiciones. La de Puyol y la de Mascherano. Siendo el argentino, sólo se saldría de su posición él.

El dilema llegaría si Puyol no estuviese disponible para el partido y saltan una terna de candidatos a ocupar el espacio bastante extensa. Entraríamos en un juego de piezas donde se moverían el propio Mascherano, Busquets y Keita. Además de una poco posible incorporación de Muniesa, que ha entrenado durante el día de hoy con el primer equipo. En esta situación cualquiera de los tres podría ser el elegido. Recordemos que Pep Guardiola ya pensó en el malí para dicha demarcación en la final de Roma ante el Manchester United tras la baja de Abidal, decidiéndose finalmente por Sylvinho para ocupar el carril zurdo y hacer un juego más natural. Keita aportaría sacrificio al servicio del colectivo, siendo un jugador apto para la fase defensiva del equipo, además de sumar en jugadas a balón parado. Con Seydou ahí, Mascherano sería el central y Busquets seguiría en el mediocentro. Y rotando nuevamente, entraría en juego la baza del Busquets central, con Mascherano al perfil zurdo, siendo Xavi la base de la jugada con Keita en el interior, junto a Iniesta. Para intentar empujar al Real Madrid hacia su portería y generar espacios a Xavi para que pueda pensar y dar velocidad al balón. Aunque también como viceversa, con Keita en la base y Xavi en su posición habitual.

Todo esto pensando en que el colectivo mantendría la misma estructura en el dibujo táctico y unos automatismos similares en la salida del balón y la designación de las posiciones según la posición de este. Pero tampoco extrañaría nada que hubiera un cambio en la forma de interpretar los movimientos. Como ya se hizo ante el Athletic de Bilbao en el Camp Nou, con Busquets como central y Abidal de lateral izquierdo. El de Badía daba facilidades para una salida más limpia y luego se sumaba al medio, mientras el francés se metía de central. Todo esto cobraría sentido si el “9” de José Mourinho fuera Adebayor.

La elección sólo la conoce Guardiola.

24 abr 2011

"Mourinho me la jugó, me mintió"

Pepe ejerciendo presión como interior izquierdo.
“Mourinho me la jugó, me mintió” debió decir Pep Guardiola al final del partido que otorgaba el título al equipo del técnico portugués. Y la realidad daría la razón al de Santpedor. No sólo se la jugó a él, sino a todos nosotros, aficionados al fútbol o a cualquiera de los dos equipos. Después de suprimir la figura del enganche en el primer round de liga, introduciendo la del mediocentro, ésta vez nos mintió inventándose a un Pepe interior izquierdo. José, listo como pocos, encontró la tecla para desequilibrar al equipo blaugrana, sobre todo durante los primeros cuarenta y cinco minutos, en la salida limpia del balón, tanto de los centrales y el mediocentro, como por las bandas con los laterales. Reproduciendo así un cortocircuito y la circulación cómoda del balón del rival. Obligando en muchos momentos a desnaturalizar su juego y provocando más pérdidas.

Con Pepe en el interior izquierdo, el equipo ganó en empuje y llegada. Expulsando de su zona a Xavi e Iniesta. La prioridad del mediocampo ésta vez no era Messi. El conjunto blanco logró en muchas fases del partido arrinconar el juego del FC Barcelona empujándolo hacia su propia área. De esta manera, como ya se hiciera en el partido de liga del sábado anterior, la profundidad sería la carencia más importante del juego. Así el Barça tendría el balón, pero sería una posesión sin calidad. El traslado del balón al lugar idóneo era mucho más complicado y así, en muchas fases del juego sufriría. Esto desarrolló algo ya comentado anteriormente: Sin profundidad no hay defensa. Limitando el juego del Barça, que por otra parte no tuvo a Xavi e Iniesta en plenitud, lo que prometía el partido como una lucha entre el protagonismo y el dominio, frente a la cultura del contragolpe se tornó diferente. Cuando logras desconectar al 6 y el 8, Messi pierde fútbol y está obligado a llegar muy atrás para recoger el balón y hacer la vida más fácil al equipo y por consiguiente, estar mucho tiempo de espaldas a la portería contraria. Si a esto le sumamos, el estar constantemente presionado al meterse en el lugar de la batalla, da pie a la superioridad, pero sin lograr dar sentido a esta. Así llegaba el gol del Real Madrid, pérdida del argentino en mediocampo tras recibir de espaldas, balón a la banda, combinación perfecta entre Marcelo y Di María y sublíme remate de Ronaldo.

El problema base, quizás, sería la poca participación -una vez más- de los extremos en el mediocampo. Villa y Pedro, debían dar amplitud al equipo en la salida, pero una vez el balón llegara a la mitad del terreno, hacer superioridad al medio. Por ello, como ya comentábamos en la previa y dado el estado de forma del canario, quizás la opción idónea era la de adelantar a Iniesta en lugar de Pedro, dando entrada en el once a Seydou Keita, ofreciendo una variante diferente al juego del Barça. Esto cobraría más sentido aún viendo la posición de Pepe y daría una alternativa al equipo. Finalmente, no fue la decisión de Pep.

Por otro lado, Mourinho dio entrada a Özil. El alemán partiría desde el extremo derecho, desplazando a Ronaldo como hombre más adelantado y Di María quedándose en banda zurda. Lo que se pretendía era contrarrestar las posibles soluciones a los problemas del mediocampo barcelonista con la incorporación de Piqué, batiendo líneas. La presencia del portugués es mucha y así, deberían tomar más riesgos en dicha acción. Su participación en la prórroga, merecería artículo aparte, fueron él y diez más.

La segunda parte el Barça, fue más Barça. Logró salvar el “escollo Pepe” dio más sentido a la circulación del balón e Iniesta despertó, puso más fútbol. Casillas por un lado, y la gran fase defensiva de la que dispone su equipo fueron claves. El segundo round fue para Mourinho.

20 abr 2011

Pepe como base del fútbol del Barça

Resuelto el primer round en empate técnico hemos podido ver como el Real Madrid variaba su sistema habitual 1-4-2-3-1 para enfrentarse al Barça, como ya habíamos comentado en la previa, introdujo la figura del mediocentro representado en Pepe renunciando en cierta medida a una posible posesión del balón. Con esto, el equipo de Mourinho dio sentido a una nueva variable que bien podría ser tónica general en los próximos encuentros ante el conjunto de Pep Guardiola. Con Pepe ocupas más espacio, ganas en presión y empujas al rival más atrás. Como pudimos ver, la alineación del portugués en dicho espacio alteraba varias funciones blaugranas. Obligaba a tocar más atrás a Xavi e Iniesta y anulaba la recepción de Messi en su zona, teniendo el argentino -también- que venir muy atrás para poder recibir el balón, o en su defecto, tirarse a las bandas donde perdería la esencia del fútbol que viene haciendo los últimos dos años. Esto, sumado a dotar al equipo de una mayor capacidad para hacer más fácil la fase defensiva y tapar líneas de pase terminaron por ahogar el fútbol de los de Guardiola. Sin profundidad el Barça pierde el sentido de su fútbol y quizás en este aspecto, tiene mucho que ver que tanto Pedro como Villa, no entendieron los nuevos movimientos para dar facilidades a Messi y despegar a partir de ahí.

Partiendo de la posición de Pepe como base, el FC Barcelona debe buscar alternativas, o trabajar en torno a la inicial los papeles de los extremos. En los últimos días, la posibilidad de alinear a Keita en lugar de Pedro, trasladando así a Iniesta adelante crece. Con ello se podrían solucionar algunos de los problemas planteados en el primer enfrentamiento. Keita formando de interior junto a Xavi, en cierto modo, condiciona la figura de Pepe. Ofrece una lucha en el balón aéreo de la zona, dando una variante a la salida del balón. Empuja al rival hacia su propia portería, haciendo más cómodo el juego de los demás, a más espacio, mejor ritmo de balón. Entrada de segunda línea, buscando espaldas de los centrales. Mayor probabilidad de acierto a balón parado ofensivo y defensivo. Jugador apto para fase defensiva. Caer a perfil izquierdo blaugrana, presumiblemente desde donde partirá Cristiano Ronaldo, ayudas que liberan a Sergio Busquets de dicha marca. Todo esto, con un Iniesta adelantado daría facilidades al de Fuentealbilla, que se sumaría al centro partiendo desde la banda para hacer superioridad y dejar carril libre al lateral, ya sea Adriano o Alves. Así de alguna manera se daría una mayor rapidez de circulación del balón que se necesita dando lugar a una situación en la que Messi, Iniesta y esporádicamente Keita, coincidan en la ‘zona Pepe’ obligando a los interiores a retroceder para las ayudas, embotellando el juego del Real Madrid. O en su defecto, la salida a por ellos de alguno de los centrales. Pudiendo activar los espacios a la espalda, ya sea por el mismo Messi, Villa o la incorporación de Alves y Adriano.

Cabría resaltar, que si el FC Barcelona lograra desarmar el plan A del club blanco, a día de hoy, no existe plan B conocido. Dando por descartado el habitual 1-4-2-3-1 que se utilizó en la ida de liga en el Camp Nou. Por lo que se podría estar dando pie a otra nueva variante de José Mourinho más que interesante.

Una vez más, suerte para todos. Que gane el fútbol.

15 abr 2011

Alves es la llave

Confirmado el pase de ambos equipos a las semifinales de la Champions League, tras eliminar a Shakhtar Donetks y Tottenham, el calendario futbolístico da lugar a hecho que podría denominarse histórico. Cuatro clásicos en un periodo de dieciocho días. Una coincidencia realmente exquisita para los aficionados al fútbol y de estos dos clubes, que actualmente podrían considerarse los mejores equipos del mundo futbolístico. Desde FALSO NUEVE queremos hacer especial hincapié en dichos enfrentamientos y durante los próximos días analizaremos los conceptos principales y diferenciales de los enfrentamientos, tanto en la previa de estos como después del pitido final. Empezando por el primer enfrentamiento de este sábado y quizás el que podría considerarse de menos relevancia de cara a el amplio margen de competiciones que se disputan en los próximos días.

Con ocho puntos por encima el FC Barcelona se presenta en el Santiago Bernabéu con un amplio colchón con el que podría permitirse pinchar en terreno enemigo. Con un hipotético empate el equipo mantendría una diferencia de seis puntos con seis jornadas por disputar donde el conjunto blanco tendría que visitar Mestalla, el Pizjuán y el Madrigal, tres salidas complicadas. Mientras recibiría en casa a Zaragoza, Getafe y Almería, equipos que luchan por salvar la categoría y que podrían presentar algunos problemas al conjunto blanco en algún caso.


ALVES DIFERENCIAL
Entrando ya en materia y analizando los precedentes de anteriores enfrentamientos el papel de Daniel Alves en el póker de encuentros se antoja diferencial. El brasileño fue de los jugadores que aportaron más al desequilibrio total de la balanza en el partido de ida del Camp Nou y es quizás, el mayor problema que podría tener José Mourinho a la hora de descontextualizar su fútbol. Como ya vimos en aquel partido, Alves obligó a Di María a vivir constantemente en fase defensiva, restando así totalmente el potencial del argentino en acciones de ataque y obligándolo a situarse prácticamente como el quinto elemento de la línea defensiva, mientras Marcelo se veía obligado a cerrar el perfil izquierdo en una zona más centrada por la diagonal fuera-dentro de Pedro. El carrilero ofreció al equipo un desahogo de su fútbol y una mayor amplitud. Como ya conocemos, en este Barça, los laterales son extremos y Alves lo lleva a la máxima expresión.

Quizás, sobre el papel el mejor antídoto sería poner en marcha la figura del mediocentro en detrimento de la figura del enganche. De esta manera el equipo tendría cubiertas las espaldas de la ‘zona Messi’ y no estaría invitando a uno de los centrales a dudar en salir a por el argentino o quedarse en su zona guardando el espacio. De igual manera, este elemento también podría ayudar con apoyos defensivos a una hipotética suma de Alves al ataque y daría pie a una mejor defensa sobre las líneas de pase. En cierto modo, durante el partido se podría dar la situación de que si finalmente Cristiano Ronaldo ocupa banda izquierda, pueda quedarse tirado a dicha banda para tras recuperación ofrecer un desahogo y una vía de escape al conjunto y a la larga, podría restar a Alves en ataque. La idea de Mourinho puede pasar por ahí, por taponar la banda derecha del Barça restando la amplitud del lateral brasileño. Para ello, posiblemente se alinearía a Arbeloa como lateral izquierdo y a Marcelo en calidad de interior por ese perfil, quitándole trabajo defensivo a Cristiano Ronaldo o al jugador que ocupe la banda.

Si no se logra sostener a Alves, el Barça tiene mucho ganado. Alves es el que activa el espacio a espaldas del lateral, y ofrece profundidad y amplitud al equipo. Mourinho debe dominar el partido en base a la desnaturalización del juego rival, y no dominarlo desde su propio juego. Ya que este argumento no le sirvió en el anterior encuentro.

10 abr 2011

El papel de Keita vs Shakhtar

Keita fue uno de los protagonistas del partido de ida de la eliminatoria Champions ante el Shakhtar Donetks. Pep Guardiola sorprendió alineando a Seydou, cuando presumiblemente se esperaba a Pedro. La idea no era otra que ofrecer una variante futbolística al equipo ante un rival con bastante potencial que salió demasiado castigado del Camp Nou y que hizo méritos para llevarse un resultado mejor al partido de vuelta. Quizás todos veíamos la alineación de Keita como una variante para guardarse las espaldas. El africano arrancando de perfil zurdo taparía las carencias de Adriano ante Douglas Costa, jugador con tendencia a la diagonal fuera-adentro. Y sobre todo, las incorporaciones de Srna, que como ya comentamos anteriormente, se pueden convertir en el arma ofensiva habitual de Lucescu cuando el partido está atascado.

Si bien, Guardiola sorprendió con un nuevo recurso táctico. Seydou Keita sólo sería interior cuando el Shakhtar comenzara a jugar desde su portería. Iniesta sería el encargado de tapar la salida de Srna con balón, una vez el balón en poder blaugrana, se metería al centro junto a Messi quedando Keita y Villa muchas veces como hombres más adelantados del equipo. Así el ‘15’ pasaría a denominarse como un falso-interior. Aprovechando el despliegue físico y el sacrificio del jugador, se convertiría en el idóneo para ejercer dicha tarea. Con el continuo movimiento de las piezas en fase ofensiva, sería quien marcara una referencia de ataque junto a los centrales, activando así espacios para una más cómoda recepción de Lionel Messi, creando espacios para el argentino. De igual manera, aprovecharía su llegada desde segunda línea, y en muchas ocasiones, ofreciéndose como una opción más para finalizar la jugada tanto en la combinación central como en la incorporación de los laterales, que como siempre, son extremos. Con la presencia de Seydou, además, se ganaba una baza en el juego aéreo tanto en la lucha por la posesión al medio, como a balón parado. Como siempre, el jugador tras pérdida actuaría como primer pressing obligando muchas veces al balón largo del equipo contrario, restando así las opciones de este para el continuismo de la posesión de la pelota. Tras el 4-1, gol de Keita. El jugador volvió más a su papel habitual dando más equilibrio al equipo y anulando cualquier opción del equipo ucraniano a dar una sorpresa al contraataque.

Nota: Esta vez, he preparado un vídeo para ilustrar algunos detalles. Es el primero que hago, por lo que no será una obra maestra. Pero intentaremos mejorar en la medida de lo posible con el paso del tiempo.